ESCRITOR Y PROMOTOR CULTURAL.
“Anajnu Veatem es mucho más que una compañía mexicana de danza tradicional judía que llega a sus primeras cinco décadas de existencia ininterrumpida y exitosa. Su nombre mismo revela todo lo que la genera, circunda y explica. Porque las dos palabras que danzan juntas para conformar su nombre -“nosotros” y “ustedes”- encarnan, cuando no devienen una dicotomía polarizadora, esa eterna dualidad que tanto aporta a una sociedad. Son, a un tiempo, espejo y vínculo. Espejo, en tanto ese eterno y cambiante grupo de jóvenes entusiastas judíos mexicanos que la conforma refleja a ese país que hace ya tanto se convirtió en una de las tierras prometidas que acogió a sus ancestros en peligro.
Vínculo, en tanto su incesante actividad a lo largo y ancho de nuestro país (y del extranjero) ha sido y es un abrazo permanente y fraternal. Y cuando digo fraternal hablo exactamente de eso: de una hermandad construida a la mitad del camino, indisoluble, que no tiene vuelta atrás. Noble y amorosa, imprevista pero ya natural. Milagrosa a su manera.
Interdisciplinario y tradicional son dos vocablos -en apariencia contrastantes- que también la definen y que dicen más de lo que puede parecer.
Su interdisciplinariedad enriquece el terreno de la danza mexicana, integrando y fundiendo estilos, culturas, lenguajes. Mientras que su tradicionalismo no habla de repetir fórmulas, sino literalmente de arraigo en el sentido etimológico del término: “echar raíces”.
Así, el árbol que ha brotado de estas raíces es hoy un roble. Y, como tal, está hecho tanto de una madera preciada y resiliente, como de un frondoso follaje bajo cuya sombra se cobija la hermosa hermandad de dos pueblos que, al igual que todos los que nuestra especie ha generado, son y serán siempre el mismo. Ya lo dijo Octavio Paz en su Piedra de Sol y Anajnu Veatem parece hacerlo suyo cada vez que baila: “…para que pueda ser he de ser otro, salir de mí, buscarme entre los otros, los otros que no son si yo no existo, los otros que me dan plena existencia.”
Gerardo Kleinburg.
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